El Consejo de Gobierno ha tomado conocimiento de los datos del informe ‘La economía del turismo en Andalucía’ de la Empresa Pública para la Gestión del Turismo y del Deporte de Andalucía a partir de los datos del Sistema de Análisis y Estadística del Turismo de Andalucía (SAETA), y que señala que la industria turística generó un total de 22.553 millones de euros el pasado año. El mayor flujo turístico contribuyó a una mayor demanda de bienes y servicios que en 2021, de modo que la comunidad elevó los niveles de producción, hasta alcanzar dicha cantidad, durante el pasado 2022.
En dicho periodo, la economía andaluza produjo bienes y servicios por un valor total de 15.202 millones de euros para satisfacer las necesidades turísticas. Se trata de aquellos que se corresponden con la producción de ramas que fabrican los bienes y servicios demandados directamente por el turismo, a lo que se suman los efectos indirectos, identificados en este caso con el volumen de actividad generado por la economía andaluza, necesario para satisfacer la demanda del propio turismo.
Esa producción de bienes y servicios genera una serie de efectos indirectos, debido a los productos y servicios que son utilizados como consumo intermedio de parte de las empresas que conforman esta industria y que son necesarios para llevar a cabo su producción y atender, así, a la demanda turística. Así, por ejemplo, la oferta de una plaza hotelera a la población turística implica, entre otros aspectos, un contrato de suministro eléctrico, que implica que la empresa que proporciona este servicio debe incrementar la producción de electricidad para abastecer al mencionado establecimiento hotelero. Es así como se produce un efecto indirecto en el sector de la energía eléctrica, consecuencia de la demanda de alojamiento por parte del turista.
Así, con la suma de los efectos directos y los indirectos, se estima en 22.553.365 euros (15.203.214 corresponden a efectos directos y 7.351.150, a indirectos) los movimientos económicos producidos por el turismo. Se constata así el efecto multiplicador del turismo, cuantificado en 1,48 puntos. De este modo, por cada euro que consume la demanda turística en el conjunto de Andalucía, nuestra economía produce por valor de un euro y cuarenta y ocho céntimos.
Para la obtención de estos cálculos se han tenido en cuenta los sectores de agricultura, productos forestales y pesca; extractivas, energía eléctrica, agua y gas; industria de bienes intermedios; alimentación y bebidas; textil, confección, cuero y calzado; manufacturas; además de comercio, hoteles, actividades inmobiliarias, restaurantes, transporte, alquiler de vehículos, actividades recreativas y culturales y otros servicios.
El informe desgrana el impacto que esta industria tiene en la región, en un contexto complejo y que sigue marcado por los efectos de la invasión de Ucrania por parte de Rusia. Esa variable se ha dejado sentir en los parámetros económicos a nivel global, afectando al suministro de materia energética y la subida de precios, que ha condicionado a los costes de los procesos productivos. Así, durante 2022, la economía andaluza ha crecido al 5,2%, tasa superior en 2,3 puntos a la registrada para la Eurozona (+3,5%) y a la Unión Europea (+3,5%) y ligeramente inferior a la española que lo ha hecho al 5,5%. Todo, en un contexto caracterizado por una senda alcista de los precios en los que se alcanza una tasa de inflación del +6,2% para el total de la economía andaluza.
Así, el turismo cerró 2022 con la llegada de 30,8 millones de turistas a Andalucía, lo que supone alcanzar el 95% del nivel del año de referencia, 2019, previo a la pandemia del Covid-19. Son algo más de diez millones y medio más que el año anterior y un incremento porcentual del 53,6%. Los ingresos se han estimado en un total de 16.897 millones de euros, lo que implica en términos reales una subida del 40,6%, respecto a 2021. Este comportamiento descansa en aspectos como la influencia del turismo extranjero, que crece al +138,4% y en menor medida el turismo procedente de España que lo hace al 32,2%. A esto se suma la subida de 4 euros del gasto medio diario.
El empleo en el sector turístico mantiene la tendencia alcista y cerró 2022 con una media de 408.300 ocupados en actividades turísticas, lo que supone un 14,8% más que en el año anterior y sólo 3,8 puntos por debajo de los niveles previos a la pandemia. No en vano, Andalucía cerró el pasado curso con un global de 52.600 ocupados en términos absolutos afianzando así un crecimiento que contribuye a recortar la distancia con respecto a los niveles de 2019, en el que la comunidad contaba con un total de 424.500 personas ocupadas.
Be the first to comment