El barítono malagueño Carlos Álvarez compartirá bambalinas con el austriaco Markus Werba, las sevillanas Leonor Bonilla y Rocío Ignacio y la italiana Anna-Doris Capitelli en la versión de ‘Le nozze di Figaro’ que subirá el telón del Teatro Cervantes de Málaga los días 1 y 3 de diciembre dentro de la 35ª Temporada Lírica patrocinada por la Fundación Unicaja y Unicaja Banco.
Al acto de presentación de esta mañana han asistido la concejala de Cultura, Mariana Pineda; la responsable de Artes Escénicas de la Fundación Unicaja, Gema Domínguez; el director del Teatro Cervantes, Juan Antonio Vigar; el subdirector territorial de banca comercial de Málaga de Unicaja Banco, Francisco Reguera, la presidenta y la directora del Coro de Ópera de Málaga, Celia González y María del Mar Muñoz Varo, y los solistas principales de la obra Carlos Álvarez, Markus Werba, Leonor Bonilla, Rocío Ignacio y Anna-Doris Capitelli.
La 35ª Temporada Lírica acoge una producción de neto acento andaluz de la ópera con la que se inició la colaboración de Wolfgang A. Mozart con el libretista Lorenzo da Ponte, un montaje de la Fondazione Teatro Nuovo Giovanni di Udine (Italia) dirigido desde el foso por el maestro gaditano Carlos Aragón y armado en la escena por el italiano Ivan Stefanutti. La Orquesta Filarmónica de Málaga y el Coro de Ópera de Málaga son otros de los puntales de esta producción musical del Teatro Cervantes.
Ivan Stefanutti juega con la idea del laberinto en su versión de ‘Le nozze di Figaro’, una de las indagaciones más completas sobre la condición humana jamás representada sobre el escenario, una obra aparentemente ligera y banal pero con muchos recovecos. Habitaciones convertidas en prisiones, amantes escondidos entre el mobiliario, enredos y confusiones trufan la puesta en escena de una ópera con la que Mozart superó las convenciones del género bufo. El libreto de ‘Le nozze di Figaro’ está inspirado en la comedia ‘La folle journée ou le mariage de Figaro’, escrita por Pierre-Augustin Caron de Beaumarchais en 1784, una obra que contravenía las costumbres sociales del París prerrevolucionario al sugerir que los siervos tenían la inteligencia y la astucia suficientes para burlar a sus amos. Lorenzo da Ponte comenzó con esta pieza, de la que mitigó el contenido político aunque sin restar nada de su humor ni de su esencia, su colaboración con el compositor salzburgués, que luego continuaría con ‘Don Giovanni’ y ‘Così fan tutte’ para cerrar una asombrosa trilogía.
‘Le nozze di Figaro’ es considerada como una de las más refinadas creaciones de la historia de la ópera, una inmortal obra en la que confluyen la diversión y la reflexión agridulce sobre el ser humano. Mozart conforma un caleidoscópico juego de caracterización de los personajes a la vez que refleja, a través de la música, sus múltiples estados de ánimo: pasión, erotismo, abandono, nostalgia o arrepentimiento.
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