Un verano sin miedos, gritos, ni dolor. En definitiva, unas vacaciones libres de violencia de género es lo que propone el programa Vacacionantes del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) a las 453 mujeres y 423 menores de los centros de acogida para víctimas de violencia machista en Andalucía. El objetivo de este recurso es ofrecer unas vacaciones divertidas, normalizadas y sin violencia a las personas acogidas, brindándoles la oportunidad de desarrollar su creatividad y afectividad a través del desarrollo de actividades tanto dentro como fuera de los centros. Este año participarán 876 personas usuarias, un 13,17% más que en 2022. Esta edición se desarrollará del 1 de julio al 8 de septiembre.
La consejera de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, Loles López, ha resaltado «la importancia de este programa para la población infantil acogida, ya que es un espacio para crear, divertirse, aprender y compartir, después de tener que afrontar hechos tan traumáticos a tan corta edad, como tener que abandonar su hogar para la protección de sus vidas y la de sus madres». Más de 68.000 personas se han beneficiado de este programa desde su creación y se desarrolla durante los periodos estivales de Navidad, Semana Santa y verano.
El programa Vacacionantes se fundamenta en la educación en valores de igualdad, respeto o empatía para conseguir en las personas acogidas una correcta expresión de emociones, resolución de conflictos, respeto a la diversidad, y refuerzo de la autoestima, entre otros beneficios. Las actuaciones se llevan a cabo por un equipo multidisciplinar, en el que se incluyen a monitores y monitoras para la población infantil acogida. En este sentido, Loles López ha destacado «el trabajo fundamental que se realiza en los centros de acogida, cuyo personal técnico se centra en el proceso de recuperación de las mujeres y menores frente a las secuelas derivadas de las terribles experiencias vividas y de su protección frente a posibles situaciones de riesgo».
Además, López ha valorado «el esfuerzo para reforzar el empoderamiento de las mujeres atendidas, fomentando la búsqueda de su autonomía y el restablecimiento de sus derechos vulnerados por la violencia sufrida, así como favorecer que la vuelta a la cotidianeidad tanto educativa como social y afectiva de los niños acogidos con sus madres».
Talleres para la diversión y superación
Esta edición se desarrolla del 1 de julio al 8 de septiembre con una participación prevista en Andalucía de 876 personas, 453 mujeres y 423 menores, lo que supone un 13,17% más que en 2022, cuando realizaron el programa 744 personas, 419 mujeres y 355 hijas e hijos. Por provincias, la participación en el Vacacionantes este verano será: en Almería, 94 personas (58 mujeres y 36 menores), un 4,44% más; en Cádiz, 118 personas (67 mujeres y 51 menores), un 35,63% más; en Córdoba, 69 personas (39 mujeres y 30 menores), igual que en 2022; en Granada, 161 personas (68 mujeres y 93 menores), un 6,62% más; en Huelva, 69 personas (37 mujeres y 32 menores), un 50% más; en Jaén, 95 personas (43 mujeres y 52 menores), un 14,45% más; en Málaga, 99 personas (45 mujeres y 54 menores), un 10% más; y en Sevilla, 171 personas (96 mujeres y 75 menores), un 8,22% más.
Las actividades programadas se dividen en cuatro grupos: creativas, educativas, deportivas/cooperativas y lúdicas. Las actuaciones creativas ofrecen la posibilidad de profundizar en el conocimiento de la realidad, explorándola, aprendiendo a expresarla y expresarse. Los talleres son una ocasión de disfrute con pequeñas y sencillas creaciones, a menudo realizadas sobre material reciclable, como el programa de creación de murales veraniegos, la ‘Escuela de mini chefs’ o el taller expresión artística ‘Decoramos el patio de la casa con elementos reciclados’.
En el bloque de las actividades educativas se busca el aprendizaje a través de la motivación y desarrollan la expresión de sentimientos, siempre desde la perspectiva de la educación en valores. Como eje transversal, la animación a la lectura es uno de los objetivos prioritarios de la intervención socioeducativa con la población acogida. Talleres de hábitos saludables, club de lecturas veraniegas o talleres de apoyo escolar y de educación ambiental son algunas de las propuestas. Por su parte, con las actuaciones deportivas y de cooperación se potencian el desarrollo psicomotriz, estimulan el autoconcepto, el equilibrio y el control psico-afectivo. Además, ayudan a desarrollar actitudes cooperativas, promoviendo la participación real e igualitaria de todos los miembros del grupo. En este apartado destacan los juegos acuáticos, las excursiones, los talleres de danza y de cometas.
Finalmente, las propuestas lúdicas proporcionan ocasiones de diversión a las familias a la vez que colaboran en el conocimiento del nuevo lugar de residencia, la valoración del patrimonio cultural y su relación con la historia de la ciudad. Estas salidas conjuntas favorecen que la relación materno-filial gane en calidad. Cine de verano, salidas organizadas a actividades culturales y fiestas de bienvenidas son algunas de las sorpresas de este verano.
Los recursos de acogida de Andalucía
El Servicio integral de atención y acogida para víctimas de violencia de género y personas a su cargo responde a un sistema coordinado de recursos cuya finalidad es ofrecer la protección y el apoyo necesario a las mujeres y a sus hijos e hijas para su recuperación personal, a través de un programa de atención integral que incluye: atención psicológica, social, socioeducativa y jurídica. Tras la ampliación y mejora de esta red, Andalucía cuenta con 35 centros de acogida donde se ofrecen medio millar de plazas, los cuales por su ubicación permiten que ninguna mujer que se encuentre en una situación de riesgo en Andalucía esté a más de 200 kilómetros de un recurso de acogida.
Los centros de acogida se dividen en tres tipos, los cuales prestan servicio las 24 horas, los 365 días al año: centros de emergencia, que ofrecen acogida inmediata y atención de emergencia; casas de acogida, que cuentan con una atención integral en centros residenciales; pisos tutelados, que son viviendas donde las mujeres y sus hijos e hijas tienen la oportunidad de reconstruir su vida de forma independiente, contando con un seguimiento integral por parte del equipo de profesionales.
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